La Noria Mágica

Hola, en esta ocasión quería traeros un cuento infantil, no soy escritora aunque me gusta mucho inventar y tengo una gran imaginación.
Me encanta las historias de  fantasía o fantasiosas  en las que nada tiene sentido, un poco como los niños ven el mundo. 
Tengo que confesar que este va a ser mi primer cuento publico, ya que los tenia para mí, espero que os guste y no seáis muy críticos.

La Noria Mágica


Esta historia empezó cuando llego la feria a mi pueblo,(por entonces yo tenia siete años) había una noria enorme que me tenia fascinada se llamaba la Noria Mágica, yo pensaba que se llamaba así por lo misterioso y emocionante que debía ser montarse en ella, pero mas lejos de la realidad.
Todo el que se bajaba de ella decía que había sido una experiencia única he inolvidable. 
Yo estaba impaciente y ansiosa por subir no podía esperar ni un minuto mas, y le insistí a mi padre para que me dejara subir. 
Cuando por fin me monte en ella sentí una extraña sensación. Yo no sabia si eran los nervios, que fueron en aumento cuando la Noria comenzó a dar sus vueltas, pero poco a poco me fui tranquilizando al ver las cosas pasar, la gente, el paisaje, las luces. 
Y sin casi darme cuenta el viaje se estaba acabando, pero cual fue mi sorpresa cuando mire a mi alrededor y no reconocía nada, no había bloques de pisos, ni coches, ni las demás atracciones, todo había desaparecido.

 En su lugar había un hermoso y grandioso bosque, cuando la Noria se paro, me baje para explorar aquel bonito lugar y para averiguar que había pasado. No me aleje ni  dos pasos de la Noria cuando se acercó a mi un hombrecillo muy chiquitito al que casi pise porque no lo vi.
 El hombre estaba muy preocupado porque decía que algo terrible le iba a pasar a su mundo si no le ayudábamos, me estuvo contando que las demás personas que habían estado no se dieron cuenta de su existencia, que solo yo conseguí verlos y que tenia que ayudarles. Pero como iba yo, una niña de siete años ha ayudarles, yo era mas grande que ellos pero seguía siendo pequeña. Yo sola no podría enfrentarme a nada, ademas era un poco miedosa. 
Me explicaron que para que su mundo no se destruyera necesitaban encontrar la gran piedra azul,  que perdieron tras sufrir una gran inundación. Era una piedra preciosa con grandes poderes y sin ella ese mundo acabaría destruido. 
Después de horas buscando la piedra, la encontramos entre un manojo de hierbas escondida, yo me puse muy contenta, pero vi que ellos no lo estaban. Les pregunte que porque no se ponían contentos íbamos  a poder salvar su mundo, pero sus caras no cambiaban, estaban como decaídos y tristes. 
Me contaron que quedaba muy poco tiempo para poner la piedra en su sitio y tenia que ser antes de que se fuera el sol, y eso ya estaba ocurriendo. Que con su tamaño no llegarían a tiempo y que la piedra para ellos era muy pesada, por eso es que me necesitaban.

 Tenia que subir la piedra al gran árbol y ponerla en una especie de nido. ( Si yo era mas grande y podía con la piedra pero nunca había escalado un árbol y menos de esas dimensiones.) 

Me arme de valor, cogí la piedra y salí corriendo hasta llegar al gran árbol, la verdad es que impresionaba muchísimo. Gracias a las clases de escalada que me habían dado y con mucho miedo conseguí dejar la piedra en su sitio, aunque casi caigo un par de veces. Cuando conseguí bajar tenían organizada una gran fiesta, todo eran risas y cantos. Estaban muy contentos ya que gracias a que encontramos la piedra y conseguimos ponerla en su sitio ese mundo seguiría existiendo para que mas niños pudieran pasar un ratito con ellos., me regalaron un pequeño alfiler azul para que los recordara. Me estaba despidiendo de todos cuando note que me mareaba, la cabeza me daba vueltas y todo se volvía de color oscuro, oía música y una voz que me decía que como estaba, que si me encontraba bien.
 Era mi padre que me contaba que me había desmayado cuando la Noria estaba por la mitad. Yo le explique lo sucedido y me dijo que no, que habíamos estado dando vueltas hasta que consiguió que pararan la Noria, que lo habría soñado mientras estaba inconsciente. 

La verdad es que durante un buen rato pensé que era cierto que todo había sido fruto de mi imaginación, hasta que descubrí mi alfiler azul.

Desde entonces siempre que viene la Noria a mi pueblo me monto en ella, para poder ver a mis amigos pequeñitos.  


¿ Te subes a la Noria?


Autora: Amalia Almansa

Comentarios

  1. ah que cuento tan lindo, me encantó, buena imaginación

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    1. perdona que haya tardado en contestar, ya sabes soy nueva en esto, jajajajajaja. Muchas gracias por tu comentario, me alegra que te haya gustado. Besos guapa

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